J.s Homero
M.R
[Verso 1]

Ella seguirá esparciendo el delirio, en grandes
corazones ambarinos.
Pero quisiera hacer un memorando, de esas cosas
que de ella aún no he olvidado.
Bella dama inspiradora, perseguida por la
desventura.
Poesía pura, que emana melodías de escritura.
De su amor yo fui vetado, me convertí en delirante
escritor desdichado.
Mi sangre en su libro un día fue derramado, no, no
estaba cortado, pero si, si estaba llorando.
Por las noches su recuerdo me perturba con
diáfanos ruidos.
Soy la nada que nunca fue de ella, fui el que nunca
fue escogido.
Me decían; ama constantemente y serás
recompensado, pero ame eternamente y fui
asesinado.
Milenarios momentos Renegados a mis pesares
que se carcomen poco a poco en mi olvido.
Y mi mayor temor no es amarla de nuevo, yo lo
haría sin importar lo que diga el destino en este
desolado desierto, pero es que un demonio no
renace dos veces del mismo infierno.